03
2020
Sandie Tillotson, un legado de liderazgo y amor
¿Prefieres escuchar a leer? Escucha la grabación del podcast al final del post!
Sandie Tillotson, una de las fundadoras de Nu Skin, fue destacada en el blog de Clasificados de USA Today en la categoría de Enfoque Empresarial (Business Spotlight). Te invitamos a leer acerca del liderazgo de esta gran mujer, cómo se empoderó para emprender un negocio e impulsa a otros para hacerlo.
Aun en el 2020, las mujeres fundadoras se enfrentan a una cuesta arriba. Sus desafíos, tanto financieros como culturales, son drásticamente mayores en comparación con los de los hombres empresarios.
A pesar de ser la mitad de la población, las mujeres fundadoras de empresas reciben sólo una proporción de un dígito de capital. Incluso aquellas con autofinanciamiento o que solicitan préstamos, a menudo luchan por ser tomadas en serio por sus homólogos masculinos.
Ahora imagina lo que fue ser Sandie Tillotson, cofundadora de la empresa de cosméticos Nu Skin, con sede en Utah, en 1984. Como referencia, ese año fue la primera vez que una mujer, Geraldine Ferraro, se postuló como candidata presidencial de un partido político estadounidense.
¿Qué llevó a Tillotson a fundar Nu Skin, y cómo tuvo éxito como fundadora? Dicho por ella misma, porque estaba motivada por el amor.
Asuntos Familiares
Hasta principios de la década de los 80, Sandie era profesora en una escuela. En busca de un cambio, su suegra la abordó con una oportunidad de venta directa.
“Estaba financieramente segura por primera vez”, afirmó Sandie, “me encantó y amaba a las personas con las que estaba trabajando”.
Pero los buenos tiempos no duraron. La compañía pronto se declaró en bancarrota. Cuando su familia decidió crear otra compañía, Sandie vio la oportunidad de intentarlo por su cuenta. Después de haber descubierto su habilidad para la eficiencia y la organización, Sandie combinó esfuerzos con un amigo y juntos comenzaron a desarrollar mejores productos para el cuidado de la piel.
“En ese momento, el cuidado para la piel era deficiente”, explica Sandie. “Los productos tenían una gran cantidad de ingredientes de relleno que eran malos. Así que simplemente dijimos: Vamos a crear una mejor línea de cuidado para la piel”.
Cuando Sandie habló con su esposo sobre el financiamiento para el negocio, él no apoyaba sacar dinero de su presupuesto o de sus ahorros para iniciar la empresa. “No se me permitió usar nuestras finanzas familiares para invertir en la compañía. Todo el mundo dijo que iba a fracasar y pensaban que era una idea estúpida”.
Ese rechazo sólo impulsó más a Sandie. Comenzó a obtener ingredientes, incluyendo humectantes recién desarrollados, y diseñó sus propios materiales de mercadotecnia.
Sin computadoras, tuvo que dibujar los folletos a mano. Adquirió botellas no utilizadas de otros proveedores, las etiquetó a mano con papel de construcción y las rellenó con producto.
“Era rústico”, admite Sandie. “Pero era auténtico. Es lo que somos. Eso nos dio la confianza para seguir adelante”.
Problemas al emprender
Con sus empaques y productos en la mano, Sandie y sus socios constituyeron Nu Skin en 1984. Meses después, quedó embarazada. “Eso es algo con lo que los fundadores hombres no tienen que lidiar”, bromea.
Pero no dejó que la maternidad la detuviera. Llevó a su bebé a la oficina con ella, amamantaba detrás de una cortina mientras estaba en descanso. Ese hijo, señala, ahora es un exitoso Afiliado de Marca para Nu Skin.
Aun así, Sandie luchó por equilibrar la maternidad con sus obligaciones corporativas. Ella recuerda un conflicto de horarios cuando su hijo protagonizó una obra escolar, pero ella había reservado un evento de conferencia para esa misma fecha un año y medio antes. “Es difícil, uno les explica eso, pero son pequeños y no lo entienden”, explica.
Esos momentos formaron su filosofía —y la de Nu Skin— la familia es primero.
“Animo a los Afiliados de Marca [de Nu Skin] a decir ‘la familia es primero’. Cuando la familia es feliz, tú eres feliz. Cuando eres feliz, es más probable que tengas éxito”.
Pero Sandie no alentó a sus hijos a tomar el mismo camino corporativo que ella había seguido. En su lugar, se dedicaron a ventas, vendiendo los mismos productos que su madre había ayudado a desarrollar. “Este camino profesional les dio flexibilidad en su vida laboral y libertad que tal vez no se encuentra en un camino corporativo más tradicional”, comenta. “Como emprendedora, puedo hacer mi negocio cuándo y cómo funcione mejor para mí”, dice. “Y esa es la razón más importante por la que hemos tenido éxito durante décadas en nuestro modelo de venta directa”.
Empoderando mujeres
Sin embargo, Nu Skin se ha adaptado de algunas otras maneras. Sandie estima que, cuando se fundó, el equipo de Nu Skin era 70 por ciento hombres y 30 por ciento mujeres. Hoy en día, las mujeres conforman la mayoría de sus Afiliados de Marca.
“Hemos progresado”, dice orgullosa. “Es un cambio social. Es porque las mujeres se sienten empoderadas”.
Pero Sandie reconoce que el empoderamiento femenino significa cosas diferentes para las personas. La gente proviene de distintos orígenes y circunstancias y tienen expectativas diferentes. Con el negocio operando a nivel mundial, ve diversos ejemplos de empoderamiento en las mujeres en diferentes países. Ella explica: “están haciendo una vida para ellas mismas mientras honran su cultura”.
Sandie ve las redes sociales como un vehículo importante para eso. Para dar un ejemplo, cuenta la historia de una mujer de León, México, que apenas tenía suficiente dinero para el autobús para ir a su primera reunión de Nu Skin.
“Si las redes sociales no estuvieran ahí para ella, nunca hubiera sabido acerca de esta oportunidad. Limpiaba casas y buscaba una vida mejor y, ahora, es una exitosa Afiliada a Marca”.
Resulta que Sandie y esa Afiliada de Marca encuentran alegría en el mismo lugar: ayudar a la gente a ayudar, no sólo a sí mismos, sino también a personas como ellas. “Es increíble ver lo que dar un poco de poder puede hacer por alguien”, reflexiona.
Motivada por el amor
En los negocios y en la vida, la motivación de Sandie se reduce a una sola palabra: amor.
Ella busca amor no sólo en su equipo, sino en los líderes que respeta en los negocios, la historia y la política.
“¿Quién está motivado por el amor?”, pregunta retóricamente. “Para mucha gente, se trata de ego o dinero. Pero de vez en cuando, alguien guía con amor, y los resultados son nada menos que espectaculares”.
¿Cómo impulsa el amor el negocio de Nu Skin? Sandie habla de un crucero que se canceló recientemente para sus principales Afiliados de Marca. Cientos de sus Afiliados en Asia oriental no podrían asistir, y la posible transmisión de enfermedades hizo que cientos de personas tuvieran más miedo.
“Aunque la cancelación tuvo un gran costo para la compañía, no estaba bien ir sin tantos de ellos”, explica. “No podíamos decir ‘lo siento, se lo perdieron’, y tampoco podíamos arriesgarnos a que alguien se enfermara en el barco”.
Aunque ya no está involucrada en las operaciones diarias, los líderes de la compañía le consultaron antes de tomar la decisión. “Les dije: ‘Ustedes tienen la información. Hagan lo correcto”.
Más que una imagen
Sandie sabe que el cambio viene lentamente. Pero las mujeres, indica, son el núcleo de la estrategia de la compañía.
“Es más que nuestra imagen”, explica. “Queremos ser innovadores. Queremos ser modernos. Implica esfuerzo. Es difícil, pero está sucediendo”.